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Andrés Enrique Galera es un oscuro contador conocido en el mundo K. Fue señalado como el valijero de Julio De Vido y se involucró en todo tipo de negocios irregulares que terminaron en una condena en su contra por enriquecimiento ilícito por ser el testaferro de José López, el ex secretario de Obras Públicas que se hizo conocido por arrojar bolsos con 9 millones de dólares dentro de un convento.
Cercano al poder y con un perfil bajo, Galera tenía contactos en diferentes sectores de la política y los negocios. Su influencia se extendía en provincias y municipios amparado por el crecimiento de la obra pública. Así fue como recaló en Lomas de Zamora, donde forjó relaciones con Insaurralde, el ex intendente investigado por lavado y enriquecimiento ilícito en la causa que se inició luego de que la modelo y acompañante Sofía Clerici subiera a las redes fotos de ambos arriba de un yate en Marbella tomando champagne.
Los fiscales Sergio Mola y Diego Velasco, que acaban de pedir la indagatoria de Insaurralde, se encargaron de describir la relación que unía al ex funcionario y al contador Galera.
Uno de los puntos centrales se refiere al departamento en Puerto Madero que usaron Insaurralde y Jésica Cirio para vivir durante varios años antes de su separación. La propiedad está ubicada en el edificio Aleph Residence, que pertenece al Distrito Cultural Faena, y fue diseñado por el famoso arquitecto Norman Forster, el mismo que creó la sede del Gobierno porteño.
El contador Andrés Galera. vinculado a la corrupción kirchnerista.En 2023, solo por las expensas de ese departamento se pagaban 727.000 pesos por mes. El piso, considerado de ultra lujo, cuenta con todo tipo de amenities, tiene 400 metros cuadrados y pertenecía a la empresa Revilier SA que era controlada por Galera.
El interior de uno de los departamentos de El Aleph, el edificio de Puerto Madero.El contador también integraba la sociedad Viani S.A., que recibió contrataciones directas y adjudicaciones del municipio de Lomas de Zamora cuando lo dirigía Insaurralde. «Este ejemplo es muy elocuente en torno a un posible supuesto de tráfico de corrupción», sostienen los fiscales.
Los vínculos de Galera
Galera también tenía un fuerte vínculo con Víctor Donadío, a quien conocía de la Cámara de la Construcción. Donadío, según los fiscales, está señalado como supuesto testaferro de Insaurralde porque a través de su empresa DOIO S.A. se involucró en la construcción de una casa del ex intendente en el barrio privado Fincas de San Vicente. Pidieron su indagatoria en la causa del yategate.
Los dos lotes donde está construida esa mansión fueron adquiridos en 2006 por Carolina Álvarez y cedidos a DOIO S.A., en una maniobra que para la Justicia buscaba enmascarar al verdadero dueño, que era Insaurralde. En 2011 DOIO S.A. le cedió la propiedad ya terminada a la empresa Sasaxa SA, una sociedad que Insaurralde creó una semana antes de asumir como intendente y en la que involucró a sus dos hijos y un sobrino.
Según la Justicia, la empresa de Galera, Viani S.A., participó junto a DOIO en el llamado a licitación de varias obras, una de ellas fue la pavimentación de la Ruta 16. Hoy hay una causa judicial que investiga esa adjudicación por presuntas irregularidades en la licitación y ejecución.
Sofía Clerici y Martín Insaurralde.Donadio, que tenía un vínculo estrecho con Galera e Insaurralde, fue quien recomendó a su arquitecto de máxima confianza, Federico Alberto Curcio para construir la casa de Insaurralde en Fincas de San Vicente. Curcio es el mismo profesional que también construyó y refaccionó la propiedad del el exsecretario de Obras Públicas José López, en Dique Lujan, donde escondió los 9 millones de dólares.. Esa casa que habitaba López estaba a nombre de Galera.
Para los fiscales, las coincidencias de nombres y vínculos no son casuales, sino que «otorgan verosimilitud al origen de los fondos que sostenemos aquí, puesto que la corrupción vinculada al ejercicio de las distintas funciones públicas ejercidas por Insaurralde, evidenciados por negociaciones incompatibles, y el incremento patrimonial apreciable que no encuentra correlato con su ingresos, se presentan de forma evidente, a poco que se repare en los nombres que aparecen en las maniobras de lavado para la puesta en circulación»