Flavio Cianciarulo, más conocido como Sr. Flavio, lanzó la semana pasada el segundo avance de su próximo disco, que grabó en vivo el pasado diciembre de 2021, desde el merendero Los Chicos del Fondo, en Mar del Plata.
El corte elegido fue una nueva versión de El regalo, tema que pertenece a su álbum solista Nueva ola, de 2011. Antes, en marzo, había editado El Son de la Negra, su versión de una canción tradicional mexicana, cuyo lanzamiento coincidió con una gira por México.
Sr. Flavio en vivo.
Actualmente, Flavio está instalado en Florianópolis, adonde viajó para acompañar a su hija Cocó, que está en el seleccionado argentino de surf y fue a entrenarse para un torneo panamericano en agosto.
Rumbo al disco en vivo
La tapa del nuevo disco de Sr. Flavio, que sale este viernes.
“Todos estos lanzamientos -cuenta desde Floripa- responden a un plan absolutamente premeditado. Yendo un poquito más atrás, esto del disco en vivo tiene que ver con un lugar que empecé a ayudar, que es el merendero Los Chicos del Fondo, en Mar del Plata”.
-¿Por qué decidiste hacer ahí la grabación?
-Resulta que en un tiempo pre-pandémico yo estaba tocando con mucho placer y gustosamente en el underground marplatense, en lugares históricos como Vinoteca Perrier y La Biblioteca Popular Juventud Moderna, con mis hijos y mi banda solista. En ese contexto se me ocurrió hacer recitales a beneficio en vez de cobrar entrada, donde la gente llevaba un alimento no perecedero.
-¿Así fue como te conectaste con el merendero?
-Sí. Un amigo me hizo la conexión con un merendero y tocamos y salió muy bien. Después di con otro, hasta que conocí al de Los Chicos del Fondo y quedé muy enganchado, pero nos tocó la pandemia y nadie más tocó porque entramos en confinamiento. Y en mi cumpleaños de 2020 tiré la consigna que me regalen el valor de un ladrillo para donar al merendero. Fue un éxito y se pudo armar una obra porque cocinaban en casillas muy endebles.
-Eso desembocó en el recital y los videos.
-Sí. La cuestión es que quedé conectado con ellos, que están en la periferia oeste de la ciudad de Mar del Plata, justo donde la ciudad termina y después solo hay campo. Volví a tocar ahí y se me ocurrió grabar ahí el disco en vivo que hace rato tenía en mente. Fue complejo pero asumí el riesgo de hacerlo sencillo y lo-wi. De ahí sale El regalo, que es el adelanto del disco que va a salir este viernes, junto con un video del recital.
-Justamente un “regalo” para ellos, porque es a beneficio del lugar.
-No me había dado cuenta de la coincidencia. Lo que quiero destacar es que me encapriché por hacerlo ahí, aunque podría hacerlo en cualquier lugar de Buenos Aires. No quise hacerlo en un teatro y después donar la plata. Quise tocar ahí mismo. Me armé una crew con ingeniero de sonido y todo un equipo, con los realizadores del video, y fuimos juntando fuerzas.
-¿Cómo es la lista de temas del disco?
-Básicamente revisita mi carrera solista y también está el estreno de Madre querida, que es un tema nuevo. De los Cadillacs hay canciones que compuse como Manuel Santillán el León, Mal bicho y Calaveras y diablitos.
-Cuándo dejás la playa y volvés a agarrar el bajo?
-Enseguida. Por ahora aprovecho y me puse a entrenar ju-jitsu brasilero, que es algo que empecé hace relativamente poco en Chapadmalal, donde vivo, y se convirtió en pasión, como una adicción linda.
-¿No habías hecho ju-jitsu en la época de tu disco con Ricardo Iorio, o era otra arte marcial?
-Yo hacía kick-boxing en esa época o un poquito antes. Fue mi primera incursión por las artes marciales y después no volví a hacer más nada, hasta ahora. En un mes regreso y quiero activar los recitales en el underground marplatense. Ahora lo que más ganas tengo es tocar y estrenar el video, que es un cortometraje que se enfoca mucho en la movida del merendero y hay una magia de amor muy grande. Se hizo en blanco y negro por sugerencia mía porque lo imaginaba así, y a los realizadores les encantó.
MFB